Lo hizo a través del programa Propietario Responsable. De uno de los terrenos extrajo 12 toneladas de basura y restos de poda.
El municipio extrajo en lo que va del año 100 toneladas de residuos de 16 terrenos privados abandonados que representaban un riesgo para la salud de los vecinos y el ambiente y, tras realizar el saneamiento correspondiente, cargó los gastos a la cuenta de los propietarios.
En línea con lo establecido en el programa Propietario Responsable, el detalle de la superficie higienizada, los metros cúbicos de residuos que se retiran y se trasladan al predio de disposición final, el combustible, las horas hombre y el costo por la publicación de los edictos, entre otros ítems, son cargados en la cuenta de cada espacio, sin perjuicio de la sanción que pueda aplicar el juez de faltas que intervenga en la causa. De las intervenciones realizadas se desprende que el valor promedio ronda entre los 50 mil y 60 mil pesos por jornada.
Las tareas dependen del estado en que se encuentre cada terreno y de sus dimensiones. Las más habituales son el corte de pasto y desmalezamiento con motoguadañas, limpieza manual de microbasurales con cuadrilla, retiro de restos de poda y jardinería. De requerirse, pueden aplicarse acciones de desrodentización. Además, el municipio dispone de un camión almejero o camión volcador para retirar los residuos de modo que no queden en la vía pública, lo que arroja unas seis toneladas promedio de residuos levantadas en cada jornada.
Denuncias al 147
Los terrenos abandonados pueden denunciarse al 147 del Centro de Atención al Vecino. Luego, el Departamento de Higiene Urbana del Ente Municipal de Servicios Urbanos (Emsur) envía un inspector a evaluar la situación y determinar el trabajo que se necesita.
No es potestad del municipio ocuparse de la limpieza de terrenos privados, ni puede ingresar en ellos si no es con una orden de un juez. Por eso, una vez visto el caso, se labra un expediente y se inician una serie de pasos legales que comienzan con la intimación al dueño del terreno para que se haga cargo de la limpieza.
De no recibirse una respuesta favorable en un tiempo prudencial, el municipio ingresa al lugar mediante una orden de allanamiento y lleva a cabo la higienización del área exterior.